Es un sitio con mucha luz y mucha paz, un lugar donde se está muy «agustito» e impera el buenrollismo. Buena gente, gente de verdad y con verdad. Buenos profesionales y buenas personas que te contagian de su magia. Hay algo que me encanta que los tres tenéis en común: el cariño y el cuidado con el que preparáis y organizáis todo, se nota que está hecho con mucho mimo y dedicación.
